Publicado el Deja un comentario

Historia de una opositora exitosa

consiguió su plaza

Como sabemos los opositores, el camino hasta nuestra plaza puede ser muy duro, de muchos altibajos que pueden hacernos pensar en abandonar.

Algunas personas tiran la toalla, otras seguimos luchando. Ambas decisiones son muy respetables, pero hoy quiero escribir este post para aquellos que siguen adelante, incluyéndome a mí misma. Porque necesitamos una dosis de motivación extra.

Por eso, la protagonista de este post es una mujer valiente y trabajadora que consiguió lo que deseaba a base de mucho trabajo. 

Siete años trabajando su vocación

Decidí pedir a Rocío, el enorme favor de colaborar conmigo en el blog de Opobox, a través de esta pequeña entrevista. Es una pena que no podáis escucharla como lo hice yo, porque transmite fuerza, habla con tanta pasión de su camino recorrido que podía ver su cara de orgullo a través de su voz.

Ella tiene 37 años, durante los cuales ha trabajado mucho por su futuro, dejando a un lado algunas partes de su presente. Estudió Trabajo Social, y cuando terminó su carrera comenzó a trabajar en una asociación. Al poco tiempo decidió que era buena idea abrir un centro de estimulación cognitiva. En este centro trabajó codo con codo y muy duro con un compañero. Ayudaba a personas con Alzheimer y a muchas otras personas que necesitaban de una trabajadora social.

Aquí comienza su batalla

Rocío tomó la decisión de opositar. ¿Cómo lo hizo? Dos fueron los motivos que le impulsaron a tomar esta tremenda decisión. Durante dos años, dando clases a opositores en su centro, de aquellas partes del temario en las que ella ya era profesional. Creó pequeños grupos de estudio. Ver como sus compañeros aprobaban su oposición, sembró en ella la semilla que más tarde daría su fruto.

Además durante su trabajo en este centro se dio cuenta de que las personas que necesitaban de un trabajador social, no siempre tenían la capacidad de pagarlo. Y decidió, definitivamente opositar, para poder ejercer su profesión y prestar sus servicios a todo el mundo, no solo aquellos con posibilidades económicas.

Francamente, me parece muy loable el motivo principal por el que estudió duro durante aproximadamente siete años.

Se presentó en 2017 y 2020 a examen, no aprobó en ninguna de las dos convocatorias. Pero eso no la frenó. A pesar de trabajar en su propio negocio durante tres años, lo que hacía que su tiempo de estudio no pudiera ser ni mucho ni constante, siguió preparándose. Para Rocío esta decisión se era en algo personal, un reto, un objetivo que se había convertido en su vida.

Cuando comenzó a trabajar de interina tuvo la oportunidad, y la agarró, de estudiar mucho más constante. De hecho, estudiaba todos los días salvo los sábados.

¿Qué sacrificó?

Mientras teníamos esta cordial charla le pregunté: » Rocío, ¿qué sacrificaste durante tus años de estudio?»

Su respuesta es digna de reflexión. Sus palabras fueron: «Sacrifiqué muchísimo. Sacrifiqué navidades, tiempo en familia como cumpleaños, cuando alguien estuvo ingresado en el hospital yo no podía ir, muchas semanas santas… (Rocío sevillana y vive la semana Santa con muchísima pasión)»

Lo que más me llamó la atención es que perdió amigos. A veces la oposición puede absorber nuestra vida social. Afortunadamente a Rocío la apoyó fuertemente su familia y los amigos que fue conociendo en su trabajo. Su familia la apoyó hasta tal punto que, cuando en 2022 se enteraron de que había conseguido su primera plaza (aprobó dos oposiciones), ellos lo celebraron como si fueran suya propia.

una opositora exitosa

Mereció la pena

A a pesar de todo lo que sacrificó, asegura que ha merecido la pena. Ha conseguido con un esfuerzo y siete años de su vida poder trabajar como quiere y donde quiere. Vivir su vocación. Además se ve recompensada por los grandes amigos que ha hecho durante este arduo trabajo. Personas que han comprendido de verdad en qué consiste opositar.

Por todo esto Rocío me parece un ejemplo de sacrificio y esfuerzo que nos puede motivar a seguir adelante con nuestra oposición. 

Rocío demuestra con su ejemplo que no es imposible aprobar una oposición y conseguir la plaza que tanto ansiamos. Que aunque no veamos la meta muy cercana está ahí y se puede conseguir corriendo sin parar.

Os animo a que sigáis a Rocío en su Instagram, @rocio_damas86 Créedme que no se arrepentiréis.

Mil gracias Rocío por abrirnos la puerta de tu opozulo y dejarnos verte estudiar con ahínco.

Si te gusta la papelería bonita, aquí encontrarás un montón de cosas cuquis:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.