Publicado el Deja un comentario

Cómo planificar nuestro tiempo para opositar

Todos los estudiantes tienen que organizar su día para pasar horas estudiando. Pero mi opinión es que en algunos estudios es más sencillo. Por ejemplo, cuando se trata de carreras universitarias es un poco más fácil. ¡Cuidado! No quiero minusvalorar el trabajo de los universitarios. De hecho yo fui universitaria y noté que teniendo la fecha de los finales, o incluso de los parciales, era un poco menos complejo.

Al estudiar una oposición la fecha de examen es un ente etéreo. Todos sabemos que existe pero nadie lo ha visto. Por lo que partir tu tiempo, dividirlo en horas de estudio se complica, puesto que no sabemos cuanto tiempo en total tenemos para preparar nuestra oposición.

Ésto, sumado a la presión que supone saber que nos lo jugamos todo en un rato (el que dura el examen) dificulta muchísimo la organización.

Por eso considero importante seguir unos criterios que nos permitan planificar nuestro día a día.

A continuación os doy unos consejos, por si sois principiantes en este maravilloso mundo de la oposición (véase la ironía)

Consejos para organizarte cuando opositas

  1. Sé realista. Esto significa que debemos ver con realismo de cuanto tiempo disponemos para estudiar cada día, teniendo en cuenta nuestras circunstancias personales. Como por ejemplo, si tenemos trabajo, si tenemos hijos… Ya sabemos que todas estas cosas nos quitan tiempo. Por eso calibremos bien cuanto podemos estudiar y planificaremos nuestro tiempo de estudio siendo verdaderamente conscientes. Lo que significa que no nos sentiremos culpables si algo no conseguimos llevar a cabo un día.
  2. Establece prioridades. Por ejemplo, si tenemos un trabajo que nos roba muchas horas diarias, debemos pensar en que lugar se encuentra la oposición en nuestra lista de prioridades. Si está de las dos primeras, muy probablemente tenemos que sacrificar de nuestro tiempo libre. Es decir, en lugar de horas de ocio, tendremos horas de estudio. Y sí, es muy duro estar estudiando mientras los demás están en el cine, por eso es tan importante que conozcamos nuestras prioridades seriamente.
  3. Organiza todos tus recursos de estudio. Si tenemos todo colocado, perfectamente ordenado, seremos más rápidos para buscar lo que necesitamos y estaremos arañando minutos al reloj. Yo por ejemplo, antes de dormir, dejo sobre el escritorio lo que tengo planeado estudiar al día siguiente. De tal manera que sólo tengo que sentarme, porque ya lo tengo todo listo. Tener todo a mano es ahorrar tiempo. ¡Comprobado!
  4. Hazte con un ambiente de estudio adecuado. Si tu lugar de estudio está bien preparado para pasar horas en él, serás más productiva. Por ejemplo, tener luz natural de frente (si estudias durante el día) o evitar las distracciones metiéndote en la última habitación de la casa. También puedes ir a la biblioteca si te resulta cómodo. Yo estudio mejor en casa… Cuestión de gustos. En cualquier caso, un lugar de estudio confortable es un gran paso para el estudio eficaz.¡Se me olvidaba! El asiento debe ser cómodo y firme. Pensemos en que vamos a pasar muchas horas estudiando. Si el asiento es incómodo, nos levantaremos más y sufriremos dolores de espalda. Esto nos robará productividad.
  5. Divide tu temario en pequeñas partes. Como dice la historia… ¿Cómo te comerías un elefante? Trozo a trozo. Pues el temario es nuestro elefante. Comerlo todo de una vez se hace muy duro, es imposible tragarlo. Si lo dividimos en porciones, por categorías o por temas, es mucho mejor. Facilita el estudio un montón.
  6. Establece un horario de estudio regular, en la medida de lo posible. La rutina, al menos para mí, es muy importante. No hay nada como adquirir un hábito, para ser productivo y eficiente.
  7. Busca tu técnica de estudio. Yo uso varias, voy cambiando conforme mi estado de ánimo y mi cansancio. Ahora uso Pomodoro. Busca la tuya y organiza tu tiempo acorde a tu forma de estudiar.
  8. Utiliza tiempos en los que estés inactiva. En el autobús, en la peluquería mientras esperas, en el tren. Puedes intentar leer, y si te mareas, puedes llevar tu temario grabado a todas partes. Yo tengo grabada la Constitución…
  9. Descansa sin sentimiento de culpabilidad. Si no descansamos nuestro cerebro no rinde. Pensemos que la naturaleza nos hace dormir unas 7 horas diarias, y tiene un motivo. Y es que nuestro cuerpo, nuestro cerebro, debe resetearse. ¡Resetea y hazlo feliz!

Seguro que hay muchas más cosas que podríamos hacer para organizar el tiempo. Pero al final, depende de cada persona y de sus circunstancias. En cualquier caso, si puedo ayudarte en algo, aquí me tienes.

Un abrazo, Ángela

Si te gusta la papelería bonita, aquí encontrarás un montón de cosas cuquis:

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.